jueves, 16 de enero de 2014

Desde mi interior


 

 

Pasan los días, pasan las horas y la eternidad nunca viene a su fin

Te pedí perdón y el silencio fue contestación

Nunca espere de ti este abandono

Me dejaste con un aura de locura y mis lágrimas sin salir apenaron mi corazón

Te pedí perdón sin tener contestación

¡Dónde estabas cuando te necesite! ¡Días y noches desgarre mi garganta aclamándote, mirando al cielo con mis ojos ensangrentados de ira!

Hace tiempo que te olvide y en tu existencia deje de creer

Mi bondad se desgarra poco a poco y mis rezos no te llegan

Pero no creas que me hundiré en océanos de lágrimas

Aunque te merezcas mi rabia, con ella no ensuciare, ni el cielo ni las estrellas

Tampoco rezare por ningún ángel caído y de eso, puedes estar tranquilo

¡A ti! ¡Si a ti! Que te escondes entre las tinieblas, si no tengo miedo al que se esconde en el cielo detrás de las estrellas ¿Cómo te voy a tener miedo a ti?

Nuca creí en ti, personaje de mil nombres, quizás tú no tengas la culpa de que mis entrañas rebosen rabia, ira o cólera

¡Nunca te implore, ni rece! Que lo hagan quienes te sirven y te halagan desde sus tumbas

Nunca fuiste capaz ni lo serás para salvar almas

Solo os pido paz para mi interior para que mis lloros y sus lágrimas, limpien de mi interior la rabia que llevo dentro

¡Nunca, nunca! os implorare ni rezare

No hay comentarios:

Publicar un comentario